10 trucos para combatir la ansiedad y el estrés cuando tienes exámenes en el instituto


Aunque me he pasado toda la vida estudiando, cada vez que llega un examen no puedo evitar ponerme nerviosa y angustiarme. Por si estás en la misma situación, he reunido 10 trucos para combatir la ansiedad y el estrés cuando tienes exámenes en el instituto.

Me resulta muy difícil relajarme cuando llegan las evaluaciones, pese a que mi madre no para de repetir que es culpa mía… ¡por no prepararlo todo con muchísimo tiempo! Por contra, mi padre comenta que le parece positivo que sufra estrés, primero porque quiere decir que me preocupa el curso, si me diera igual todo estaría muy tranquila, y después porque asegura que me ayuda, pues los nervios sirven de alarma para entender que queda poco para el examen y que me tengo que poner a hincar los codos.

Resulta bastante inevitable sufrirlo. Se produce sobre todo por la falta de planificación, porque tus progenitores te presionan recordándote que de tus notas depende que el día de mañana seas pobre, porque la empollona de la clase te mira por encima del hombro como si estuviera segura de que va a sacar más nota que tú, y porque preferirías estar viendo series y que todo hubiera acabado ya.

Por lo menos, existen algunos métodos para conseguir que te sientas un poco mejor. Repasamos 10 trucos para combatir la ansiedad y el estrés cuando tienes exámenes en el instituto. Espero que te sirvan de utilidad.

10 trucos para combatir la ansiedad y el estrés cuando tienes exámenes en el instituto

He reunido los que a mí me van mejor, aunque cada persona es un mundo, por lo que es bastante probable que te funcionen más algunos tips que otros.

1. Planifica los días que te quedan de estudio

Quizás se trate del mejor consejo que te puedo dar. Sean muchos o pocos, reparte los temas que aún no has estudiado entre el tiempo que falte para que llegue el examen. Es decir, que si vas a tener cinco tardes disponibles para diez lecciones, tocas a dos cada una. Decide cuáles serán. De esta forma tendrás la sensación de que lo tienes todo bajo control.

2.  Haz ejercicio

Durante los días de exámenes, conviene dedicar más horas a estudiar, y dejar de lado algunas actividades, como irte de fiesta con las amigas. Pero no pases todo el tiempo encerrada, conviene oxigenarse. Si practicas alguna actividad deportiva, como aeróbic, fútbol o lo que sea, intenta asistir como lo haces normalmente, te servirá para liberar tensiones. En caso contrario, sal a dar un largo paseo, será bastante relajante.

3. Adopta a un gato

Los gatos me resultan relajantes, de hecho existe lo que se conoce como gatoterapia, que consiste en permanecer cerca de un minino para relajarte. Cuando mi gata se queda dormida a mi lado o se pone a ronronear me siento mucho más tranquila. Además, tiende a ponerme de buen humor, y me hace sonreír, sin necesidad de tomar psicofármacos ni nada chungo. Este consejo también sirve para quienes tengáis otras mascotas.

4. Come chocolate a mansalva

No sabría escribir sobre las razones médicas que explican que el chocolate sea autodepresivo (si miro en internet me sale que el cacao reduce el cortisol, la hormona asociada con el estrés, y tiene un efecto relajante en el cuerpo, y además libera endorfinas que actúan como un reductor natural del estrés). Tampoco sé muy bien lo que indican los últimos estudios científicos y además me dan igual, porque lo importante es que funciona. Si comes mucho chocolate durante los días chungos, te sientes mejor. Es un hecho.

5. Apaga el teléfono móvil

Algunos días he estado estudiando con el smartphone al lado, y me he dado cuenta de que de vez en cuando miro a ver si alguien me ha escrito en WhatsApp, o si tengo correo, etc. Como resultado he debido estar bastante tiempo entretenida, ya que siempre pasas más tiempo en estas tareas que el previsto. Mentalízate de que sales ganando si lo dejas de lado unas horas, luego cuando llegue la noche te puedes permitir estar un rato contestando a lo que te hayan escrito. Estarás mucho más tranquila si usas este método.

6. Duerme el suficiente tiempo

Se piensa erróneamente que cuantas más horas se estudie mejor, quitándole tiempo al sueño. Pero importa más la productividad, que el tiempo dedicado a instruirse se aproveche bien, por lo que conviene estar descansado, en plena forma. Además, al estar agotado se agudiza la sensación de angustia y nerviosismo que te deja bloqueado.

7. Respeta tus horas de comer habituales

Por mucho que te quede por estudiar, trata de mantener la hora de las comidas habituales para no alterar tu rutina, ya que de esta forma tu organismo se sentiría afectado, y aumentaría tu sensación de estrés. Evita tomar café, Coca Cola y otros estimulantes, mejor alimentos naturales.

8. Escucha música

No se trata de ponerte One Direction o tus grupos favoritos a toda pastilla, eso mejor cuando acabes el examen para celebrarlo. Pero ayuda poner muy bajito mientras estudias algo de música chill out o música clásica, que sirve para tranquilizarse.

9. Haz ejercicios de relajación y meditación 

Funciona muy bien meditar al menos una vez al día. Para ello, siéntate en una silla cómoda o recuéstate en la cama. Después cierra los ojos y piensa en todos los músculos de tu cuerpo, de arriba a abajo para relajarlos. Después imagínate recorriendo un idílico paisaje lleno de vegetación, donde puedes escuchar a los pájaros cantando, y oler las flores. Permanece así unos minutos antes de abrir los ojos, respirar hondo y retomar el estudio.


10. Búscate un sitio adecuado para estudiar

Para mantener la tranquilidad resulta fundamental encontrar el rincón perfecto para el estudio. Que sea un sitio en el que te encuentres cómodo, pero no tanto como para que te quedes dormido. Debe ser lo más silencioso posible, y por supuesto tener mesa, silla, buena ventilación, iluminación, la temperatura adecuada y si puede ser que no entre nadie más, o al menos que no te revuelvan o te cambien los libros y folios de sitio.

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